Algún día ese hilo invisible anudará al sentimiento,
entrará por la mañana desde donde nace el sol.
Seremos olas en reposo,
no he de hablar, tu has de saber.
Tu pensar será mi adivinanza,
nuestras miradas se sentirán ufanas
transcendiendo los espacios
y no habrá luna que no nos ame.
En el riachuelo, cómplices peces se alegraran
tras el juego seductor de mariposas siguiendo nuestra danza.
El girasol dejará un beso en mi frente
que yo pasaré a tu boca y emborracharé tu beso.
Algún día ese hilo que no vemos,
nos abrazará de tal manera
que seremos uno entero
en el canto
del universo.
EliViv
28-07-12
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