
Voy a hablarte de mi olvido
de una manera sencilla,
despacio y profunda.
Le haces falta a mi piel,
a mis manos,
mi sonrisa,
a mis ratos
y a mis rotos.
De tu olvido,
sin que me lo digas intuyo
tu sangre ardiendo como la mía
sin que logres entender.
Las miradas a través de un celofán
se distorsionan.
En mi pecho corren ganas
de colores diferentes,
la razón guarda otras notas
y esta vez no me acompaña.
Pero te pienso,
te siento,
te extraño.
Y porqué si creo
que la vida es tan sencilla,
¿me cuesta tanto colocar
mis pétalos en la tuya?
Hoy una vez más
te seguiré olvidando.
EliViv
12-10-14
No hay comentarios:
Publicar un comentario