Te extraño en cada segundo del tiempo,
en las gotas que caen curiosas sobre las ventanas
mientras las ardillas buscan los techos.
Cuando repite la luna llena
puedo sentir tus ojos brillando,
también cuando el sol te nombra.
En todos los momentos
que te trajeron a mí.
Te extraño en cada día que renazco,
en cada noche que se duerme
sobre mi desvelo.
La vida tiene un sentimiento extraño
y te llevo en un corazón
que va cambiando su camino.
Me traje la dulzura de tu niño
dejando al estepario que te atrapa,
solitario dentro de sus dudas.
Pero aunque no quiero, te extraño y te deseo.
EliViv
04-12-14
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